-No le dije. No puedo!
-Definitivamente; Él pidió que.
-Ναι. Mucho deseo pude detenerme frente a ella y decirle lo que siento... Lo sé, όμως, que no puedo!!!
Jorge estaba sentado como Buda en esas horribles sillas de oficina azul de sonrió, Ella me miró a los ojos y, bajando la voz como hacía cada vez que quería escuchar cuidadosamente, me dijo:
-A contar una historia... Y sin esperar a que de acuerdo, Jorge empezó a narrar:
✦ «El Alysodemenos Elefantas"
